Resumen: Adultez

EDAD ADULTA TEMPRANA Y MEDIA

Tradicionalmente, se han considerado muchas épocas como las adecuadas para realizar ciertas actividades, como casarse, tener hijos, tener una profesión o jubilarse, lo anterior viene determinado por aspectos culturales y ambientales.  Con el paso de los años, la expectativa de vida y por consiguiente de logros familiares ha aumentado por los avances en tecnologías médicas, lo que pronostica una flexibilidad de vida en cuanto a la edad más favorable.

Independiente de la edad, cualquier individuo puede llegar a ser independiente incluso a los 20 años, o seleccionar su carrera en la adultez joven, intermedia y hasta tardía, así mismo, podemos iniciar una relación amorosa en la adolescencia y hasta tener hijos a los 20 años, o bien, no hacerlo hasta la adultez media.

Entre los 20-40 años de edad el individuo cuenta con su mejor estado y desempeño físico, especialmente de los 25-30. Posteriormente se van perdiendo facultades fisiológicas como la agudeza visual, olfatoria, gustativa y auditiva.

Todas las actitudes familiares, la salud del pasado, el sexo y la personalidad individual, desempeñan una importante labor en el proceso de enfrentamiento a los procesos de declive de la función reproductiva, el padecimiento de enfermedades y la ganancia de peso. Las mujeres tienen la tendencia a cuidar más de su salud por las implicaciones de cuidado durante su embarazo; mientras que los hombres tienden a desarrollar actividades físicas para ignorar los síntomas de su deterioro.

La menopausia se da entre los 38 y los 60 años, más frecuentemente entre los 42 y 58 y el cuerpo experimenta cambios fisiológicos que llevan a la menopausia, es lo que se conoce como climaterio. Se manifiesta con sofocación, pérdida recubrimiento y flujo vaginal que conllevan a relaciones dispareunia.

Las habilidades verbales aumentan con la madurez y la senectud, junto con la capacidad para la resolución de problemas, así mismo, la experiencia es radical en las relaciones interpersonales, por lo cual los puntos de vista son cambiantes de acuerdo a la edad. Esto demuestra que la secuencia de períodos estables y de transición continúa a lo largo de la vida, enfrentándonos frecuentemente a nuevos retos y desarrollándonos a través de ellos.